Uno de los clásicos dentro de los vehículos todoterreno, encontramos a la Jeep Wrangler, vehículo que viera su origen en 1987 y que desde ese año a la actualidad no se ha detenido su fabricación, convirtiéndose en todo un uno de los emblemas de Jeep. Claramente podríamos reconocer a uno de estos coches por su imagen amplia, fuerte y geométrica, como si estuviera listo para ser parte de una expedición en medio de rutas rurales de recorrido complicado, siendo esta justamente su finalidad, habiendo tenido sus antecedentes históricos en lo que fuera un coche militar de los Estados Unidos, el Jeep CJ, del cual se basó su imagen.
A lo largo de su historia el Jeep Wrangler ha manejado tres generaciones, teniendo cada una de ellas un nombre propio: YJ (1987-1992), TJ (1992-2006) y JK (2006- actualidad), siendo los cambios entre ellas ligeros pero notorios. En cuanto a la versión más reciente de este vehículo encontramos una motorización en base a un 3.8 litros de gasolina que es capaz de generar una potencia máxima de 199 CV con un cambio de cuatro velocidades en automático.