Los tanques además están creados de manera tal que son muy resistentes ante la posibilidad de accidentes tales como choques de toda clase o cualquier otra falla. Esto es necesario debido a que el combustible es altamente inflamable. Aparte también se suele posicionar al tanque en una parte del vehículo que se caracteriza por estar mucho más protegida, siendo esto considerado como un seguro extra ante cualquier tipo de accidente. También cuenta con un sellamiento especial para evitar que gases tóxicos puedan terminar afectando a todo individuo que se encuentre en contacto con ello, pudiendo producir cáncer.